RENACER habla de renunciar a nuestras emociones...
No entiendo esto.
Renacer es un acto dinámico, implica movimiento, depende de mí pero también de mi entorno.
Es un proceso en el tiempo y en el espacio, nunca puede tener el mismo sentido, nunca puede ser igual.
No se puede renacer sin emociones, sin emociones no hay cambio...
Puedo intentar manejarlas, pero no renunciar a ellas. Ellas son las que me hacen así como soy.
Puedo intentar no asustarme del miedo, confiando anticipadamente en que el dolor algún día cesará, o al menos... nunca se sabe.
¿Cuál es la diferencia entre sentimiento y emoción?
Creía que eran parte de lo mismo.
No creo que pueda emocionarme algo que no despierta en mi ningún sentimiento, aunque sea negativo.
Cuando algo me es indiferente no soy capaz de notarlo.
A lo mejor es sólo una variación dialéctica, pero no consigo entenderlo.
El amor por mis hijos, tanto el de Ludmila como el de Gael, es el que mantiene la esperanza sobre mi cabeza. El mismo que mira hacia adelante a pesar del tremendo e indescriptible dolor.
No ha ganado el dolor mis ganas de vivir, pero está conmigo, a mi lado, y creo que está bien que esté aquí.
El dolor es una alarma, te hace estar en guardia. Sentirlo te puede salvar la vida.
A lo mejor, si alguno de los pediatras que durante cuatro días vieron a mi hija con 40º de fiebre hubiera sentido una alarma, Ludmila hoy estaría viva.
En cambio, no tuvieron dudas. Alejaron al miedo, y la muerte dejó de esperar.
Ahí realmente entendí que el amor...
y sobre todo el amor por los hijos, siempre es más fuerte...
El amor es eterno.

TE AMO PRINCESA MARIPOSA
mamá
(Esto no es una crítica a RENACER ni a la logoterapia.
Es más bien, una manera de ir tratando de entender...)
(Esto no es una crítica a RENACER ni a la logoterapia.
Es más bien, una manera de ir tratando de entender...)